martes, 11 de diciembre de 2007

Volando lejos

Los arboles de la cuadra siempre fueron los mismos.
O al menos yo siempre me los acorde de la misma manera, no se si para el vecino de al lado, que ya tiene como 60 años, los arboles de la cortadita siempre fueron los mismos.
Yo no se por que nadie me conto pero igual supongo que no siempre fueron asi los pinos.
El tiempo si siempre es el mismo y nosotros vamos pasando por el, a traves de el, y vamos
tambien cambiando y cambia nuestro alrededor.
Y son justamente las cosas que no cambian(como los arboles de haedo y vieytes la planta de moras de aca a 3 cuadras), las que me hicieron dar cuenta de cuan rapido vamos en la vida.
Y hasta tenemos tiempo de estar aburridos, malumorados, de hacernos la cabeza por lo que sea, tenemos tiempo para todo y igual no nos alcanza.
Quizas si me hubieran enseñado eso en el jardin, a valorar el tiempo en calidad y no cantidad.
Hasta tenemos tiempo de volver, de arrepentirnos.
Y ya me estoy remontando al 97, a los guardapolvos, al barrio que entonces parecia mas viejo de lo que es ahora, y en realidad siempre fue el mismo para mi, y desde donde planeo puedo ver las hojas en otoño en la cuadra de la maternidad, cayendo, cayendo, en un mundo mas tranquilo.

Es acaso un sueño o una extraña felicidad latente, pero prefiero dar circulos sobre uvafo y no alejarme mas, no pasar las fronteras (aunque me dejaban ir mas alla), y verme comprando fosforitos para navidad, cañitas, que nunca llegue a tirar.
Y me acuerdo de ustedes, los que estaban, y tambien de los que no estuvieron, ahora donde estaran??
Recordaran lo que yo recuerdo?
El mundo siempre es el mismo, somos nosotros los que a diferencias de los arboles, cambiamos constantemente, tan constante que no tenemos forma.
Y a veces despierto cosas dormidas, lugares en los que siempre estoy, y estare, mientras pueda acordarme.